Corría enero del año 2007. En ese entonces, Internet aun era algo underground, a pesar de la explosiva aparición de variopintas redes sociales (la mayoría de dating), Fotolog era el rey indiscutido en América Latina y Youtube, servía para ver (y subir) videos musicales sin tanto color con el Copyright como ahora. La telefonía celular, aun era básica, a pesar de que ya algunos tenían reproductor de Mp3 y cámara. Sin embargo todo cambió en un día 10 del mes y año mencionado, con esta presentación 👇.
Para entonces, aun estaba con nosotros a quien muchos «creen aún» el revolucionario «inventor», llamado Steve Jobs. No voy a ahondar en lo que realmente hizo (llevar a lo simple, la informática y venderlo como algo con status), pero sin duda fue uno de los pilares de lo que hoy tenemos. En dicha presentación, se presentó el primer iPhone.
Cuando Blackberry, el primer smartphone, aun reinaba y Nokia era el mas innovador en cuanto a ingeniería, el golpe dado por Apple se empezó a sentir. Por una parte, el dispositivo eliminó el teclado físico que el mencionado blackberry y otros dispositivos tenían, reemplazándolo por una pantalla multitouch que traía uno integrado. Agregó el iPod como reproductor y el navegador emblema, Safari, pero además, colocó la primera tienda de aplicaciones en línea, invitando a las compañías desarrolladoras a crear dichas apps para el dispositivo y el iPod Touch.
A Chile creo que llegaron pocos, pero su sucesor hizo furor y despertó el hambre, especialmente de aquellos que quieren sentirse con status. Sus especificaciones, eran lo mas avanzado para entonces (al menos era lo que se pensaba). En paralelo, Google preparaba el camino para su S.O. multiplataforma para móviles: Android, el cual permitió a Samsung primero y después a varios fabricantes, a desarrollar su gama de dispositivos.
Sin embargo, lo que realmente despertaba interés, eran las aplicaciones. Me explico: hasta ese entonces, si bien existían algunas que permitían eso en dispositivos antecesores, la mayoría lo hacía a través del navegador. Se implementaron entonces, nuevas tecnologías orientadas al software que permitieron a las compañías, crearlas para iPhone. Una que se mantuvo exclusiva por un buen tiempo fue Instagram, antes de ser comprada por Facebook.
Y aquí es donde encontramos el comienzo de todo. La facilidad que permitía iPhone y su competencia posteriormente, fue el poder conectarse a las redes sociales en boga y navegar por Internet, sin depender de un PC, pero además, permitiendo hacer tareas sencillas, usarlo como guía de navegación gracias al GPS y Google Maps, y el poder navegar y enviar mensajes ya no dependiendo de los SMS, además de hacer más comunes las videollamadas. Esto obligó a las empresas de Internet, especialmente a las redes sociales, a optimizarse y aprovechar las ventajas multimedia de iPhone y competencia. Y para que todas estas maravillas funcionaran como correspondía, las compañías de telecomunicaciones, empezaron a implementar redes de datos compatibles, (hoy en auge 4G y 5G, antes la mas rapida era HDSPA o 3G).
Claramente eso si, muchas empresas y sitios web, como los mencionados al principio, empezaron a decaer. Las nuevas generaciones ya no usaban fotolog, ni IRC. Todo era Facebook, Twitter y Youtube. Incluso los medios tradicionales, como la TV, empezaron a utilizarlas como medio de promoción de sus programas y noticiarios. Nace entonces, el oficio de Community Manager, o sea, weones alumbrados que pasan posteando todo el día, personas cuya labor es «acercar a la marca a la comunidad» -luego dicen que el capitalismo es el malo- y derivado de estos, los «influencers», que llegan incluso a ser peor. Nace la industria que se alimenta del ego, y que ha causado muchos problemas, especialmente de estrés y <cheems> «ansiedad» </cheems> en jóvenes que buscan a toda costa, destacar en Internet.
Ahora bien, en estos 15 años, los dispositivos móviles pasaron de ser un lujo y símbolo de estatus a una necesidad. Y el hecho de que iPhone lograra posicionarse y ser un éxito, entusiasmó a los fabricantes para crear sus propios smartphones, abaratando su acceso. Las empresas desarrolladoras, tanto de aplicaciones como de juegos, han logrado sacar montón de productos que uno puede escoger. Incluso las compañías de pago online como Paypal, tuvieron un auge en cuanto a transacciones. Hoy todo lo tienes en la punta de tus dedos, pero lamentablemente mucha gente no estaba preparada para la avalancha de información. De lo contrario, no querrían volver a probar un sistema como el que anhelaban en los años 60.
Como sea, lo importante aquí es que, al igual que paso con Napster en su momento, un nuevo cambio de era se ha visto. Internet tuvo un antes y un después con esto y eso en solo el transcurso de 15 años. Imaginen lo que viene más adelante. No es el futuro donde ya hay colonias en la Luna o autos voladores como en Blade Runner, pero es un avance que nadie pensaba en los 90 al menos, que se daría tanto. Si es bueno o malo, depende de cada quien.
Yo por mi parte, aun escucho música en mi MP3 Sony Walkman =).
Desde la otra vereda 